El Ahorro Previsional Voluntario (APV) es un mecanismo que permite que los trabajadores, ya sean dependientes o independientes, ahorren por sobre lo cotizado obligatoriamente en su Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
Como lo indica su nombre, este sistema no es una imposición, ya que es complementaria al ahorro en la cuenta de capitalización individual obligatoria que tiene una persona en su AFP.
De esta manera, de acuerdo con lo indicado por la Superintendencia de Pensiones, se tiene como objetivo, tanto compensar los periodos que no fueron cotizados, como aumentar el monto de las pensiones.
Además, de acuerdo con lo indicado por la entidad, las instituciones que pueden administrar una cuenta de APV son las siguientes:
AFP.
Administradoras de fondos mutuos.
Administradoras de fondos de inversión.
Administradoras de fondos para la vivienda.
Administradoras generales de fondos.
Bancos.
Compañías de seguros de vida.
Intermediarios de valores, cuyos planes hayan sido aprobados por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
¿Cómo mejorar la pensión con la cuenta de APV?
Al igual que como fue mencionado anteriormente, las personas pueden mejorar su pensión al tener una cuenta APV, debido a que, de esta manera, tendrán más dinero ahorrado que solamente el obtenido a través de las cotizaciones obligatorias.
Para poder realizar este proceso, los trabajadores, conforme a lo indicado por la CMF, deben comunicarse con la entidad escogida mediante la suscripción del formulario denominado “Selección de Alternativas de Ahorro Previsional Voluntario”.
Además, se indica que los recursos acumulados por los trabajadores en las AFP, o las otras instituciones autorizadas, por cotizaciones voluntarias y depósitos de ahorro previsional voluntario podrán ser retirados o traspasados, total o parcialmente, a cualquiera de las entidades mencionadas anteriormente.
Otorga mayores beneficios, flexibilidad y rentabilidad al cotizante.
Ofrece alternativas de inversión para los ahorrantes.
Se puede disponer de parte o de todos los ahorros sin esperar hasta la jubilación.
Son planes de ahorro inembargables, que, en caso de dificultades financieras o legales, no se ven afectados.
Tiene beneficios tributarios, por lo que el afiliado puede rebajar directamente de su base tributable el monto equivalente en impuestos, mientras mayor sea el ingreso que perciba la persona, mayor será el descuento por impuestos.
Además, es relevante destacar que no existe un monto de inversión mínimo único, debido a que los valores son determinados por las entidades que ofrecen estas alternativas, motivo por el que se recomienda que las personas se comuniquen directamente con las instituciones para así tener acceso a toda la información.
Las personas y empresas que residen en un país están obligadas por ley a pagar diferentesimpuestos, siendo algunos de estos proporcionales.
Por medio del dinero obtenido por estos, conforme a lo descrito por el Servicio de Impuestos Internos (SII), el Estado puede financiar los gastos de su administración, así como también “la provisión de bienes y servicios de carácter público”.
¿Qué son los impuestos proporcionales?
Los impuestos proporcionales son aquellos que disponen del mismo porcentaje para todos los ingresos, por lo que no varía, de acuerdo con lo indicado por el Servicio Interno de Impuestos de Estados Unidos.
Por ende, el pago que efectúen las personas siempre tendrá un monto fijo para toda la población, a diferencia de otros en los que puede cambiar la cantidad de dinero de acuerdo al ingreso personal de cada individuo.
Una forma de ver esto, conforme a lo descrito por TaxDown, es a través del Impuesto al Valor Agregado (IVA), debido a que, con este, sin importar las cantidad de renta que reciban las personas, deben pagar el mismo monto.
Por ejemplo, en Chile el IVA consiste del recargo del 19% al monto del precio final, el cual es determinado por el vendedor de un producto o servicio, por lo que es una cifra que es fija que no cambia y que es igual para cada persona.
Clasificación de los impuestos en Chile
Los impuestos en Chile están clasificados en los siguientes tres grupos, según el SII:
Impuestos indirectos
Este impuesto es aquel que se aplica por el uso de la riqueza sobre las personas, por lo que es indirecto. De esta manera, entre estos, se pueden encontrar los siguientes:
Impuesto a las Ventas y Servicios (IVA).
Impuesto a los Productos Suntuarios.
Impuesto a las Bebidas Alcohólicas, Analcohólicas y Productos Similares.
Impuesto a los Tabacos.
Impuesto a los Combustibles.
Impuesto a los Actos Jurídicos (de timbres y estampillas).
Impuesto al Comercio Exterior.
Impuestos directos
Estos impuestos son aplicados directamente al titular de la renta o riquezas que los paga. En este grupo, se encuentran los siguientes:
Impuesto a la Renta de Primera Categoría.
Impuesto Único de Segunda Categoría.
Impuesto Global Complementario.
Impuesto Adicional.
Otros impuestos
Además de los impuestos indirectos o directos, existen otros que no clasifican en estas categorías desde el punto de vista de gasto e ingreso, siendo estos los siguientes:
Impuesto Territorial.
Impuestos a las Herencias, Asignaciones y Donaciones.
Enero, un mes de sol, playa, vacaciones y… ¿planificación presupuestaria?
Según una encuesta de Ipsos, la mitad de los chilenos dice estar pasando por dificultades financieras y solo el 19% dice vivir cómodamente o que le va bien.
En Cajas de Chile nos interesa fortalecer la salud financiera de las personas, por lo que en este artículo queremos ayudarte en un tema: la planificación presupuestaria o cómo estimar y registrar los ingresos y gastos que tendrás durante un período determinado, en este caso, el 2024.
Al hacerlo, podrás identificar tus hábitos de consumo, priorizar tus necesidades, ahorrar para el futuro, reducir tus deudas y evitar el estrés financiero.
No hay que ser experto en finanzas ni tener un software especializado para hacer una planificación presupuestaria del año. Solo necesitas tener claro cuáles son tus ingresos, tus gastos fijos y variables, tus objetivos y tu capacidad de ahorro. Con estos datos, podrás elaborar un presupuesto anual que se adapte a tu realidad y que te permita tomar mejores decisiones financieras.
En este artículo, te mostraremos cómo hacer una planificación presupuestaria del año en 5 pasos simples. Además, te daremos algunos consejos y herramientas adicionales para optimizar tu presupuesto y lograr tus metas financieras.
Esperamos que este contenido sea de utilidad para ti.
¿Qué es la planificación presupuestaria y por qué es importante?
La planificación presupuestaria es el conjunto de reglas y lineamientos que se siguen al elaborar un presupuesto que implementará una persona, una familia, una empresa o incluso el Estado.
En términos simples: un presupuesto es una proyección anticipada —por eso lo haremos en enero— que estima los ingresos y gastos que se tendrán durante un período determinado.
La planificación presupuestaria tiene varios beneficios para mejorar la salud financiera, que es el estado de equilibrio y bienestar que se logra al tener un control sobre las finanzas personales.
Algunos de estos beneficios son:
Permite identificar los hábitos de consumo y priorizar las necesidades.
Ayuda a ahorrar para el futuro, reducir las deudas y evitar el estrés financiero.
Facilita la toma de decisiones financieras inteligentes y alineadas con los objetivos personales o familiares.
Mejora la capacidad de afrontar imprevistos o emergencias financieras.
La planificación presupuestaria es un proceso que requiere de disciplina, compromiso y constancia. Y, como hemos dicho previamente acá en Cajas de Chile, también implica controlar las emociones que pueden influir en la forma de gastar y ahorrar dinero, como el estrés, la tristeza, la envidia o la culpa. Para ello, se pueden buscar formas de canalizar esas emociones de manera positiva y saludable, sin recurrir al dinero.
En el siguiente subtítulo, te mostraremos cómo hacer una planificación presupuestaria del año en 5 pasos simples. Además, te daremos algunos consejos y herramientas adicionales para optimizar tu presupuesto y lograr tus metas financieras.
Sigue leyendo y descubre cómo puedes mejorar tu salud financiera en el 2024.
Cómo hacer una planificación presupuestaria del año: 5 pasos simples
Hacer una planificación presupuestaria del año no es tan difícil como parece. Solo necesitas seguir estos 5 pasos simples:
Analiza tu situación financiera actual. Revisa tus ingresos, tus gastos, tus deudas y tu capacidad de ahorro. Puedes usar alguna herramienta o aplicación que te ayude a registrar y categorizar tus movimientos financieros. En este artículo recomendamos algunas opciones para que instales en tu teléfono.
Define tus objetivos financieros. Piensa qué quieres lograr con tu dinero en el corto, mediano y largo plazo. Por ejemplo, comprar un auto, pagar un curso, viajar, jubilar, etc. Sé específico, realista y medible. Asigna un monto y un plazo a cada objetivo. Sugerencia: conoce las metas financieras SMART.
Elabora tu presupuesto anual. Estima tus ingresos y gastos para el año, considerando tus objetivos financieros. Puedes usar alguna plantilla o formato que te facilite el proceso; por ejemplo, una planilla de Excel como la que presentamos acá. Intenta que tus ingresos sean mayores que tus gastos, y destina una parte de tu dinero al ahorro y la inversión.
Implementa y monitorea tu presupuesto. Sigue tu plan de acción y registra tus ingresos y gastos reales. Compara periódicamente tu presupuesto estimado con el ejecutado, y verifica si estás cumpliendo tus objetivos. Si hay alguna diferencia o desviación, analiza las causas y haz los ajustes necesarios. Acá hay más ideas para que profundices en este punto.
Evalúa y mejora tu presupuesto. Al final del año, revisa tu planificación presupuestaria y evalúa tu desempeño. Reconoce tus logros y aprende de tus errores. Identifica las oportunidades de mejora y establece nuevos objetivos para el próximo año.
Con estos 5 pasos podrás hacer una planificación presupuestaria del año que se adapte a tu realidad y que te permita mejorar tu salud financiera.
En el siguiente subtítulo, te daremos algunos consejos y herramientas adicionales para optimizar tu presupuesto y lograr tus metas financieras.
Planificación presupuestaria: consejos y herramientas adicionales
Ya tienes una noción básica de cómo hacer una planificación presupuestaria del año. ¡Muy bien!
Pero viene otra pregunta: ¿te gustaría optimizar tu presupuesto y lograr mejores metas financieras?
Entonces, te invitamos a seguir estos consejos y herramientas adicionales que te ayudarán a mejorar tu salud financiera en el 2024.
Usa plantillas de Excel para organizar tu presupuesto personal. Excel es un programa muy avanzado que te permite crear y adaptar tus propias plantillas, o descargarlas desde otros sitios web. Ya lo mencionamos, pero en nuestro blog encontrarás un artículo que te explica cómo usar plantillas de Excel para organizar tu presupuesto personal.
Busca formas de aumentar tus ingresos. Si tu presupuesto es muy ajustado o quieres alcanzar tus metas financieras más rápido, puedes buscar formas de generar ingresos adicionales, como vender cosas que ya no usas, ofrecer tus servicios o habilidades, invertir en algún negocio o proyecto, etc. Por ejemplo, este artículo te da ideas para generar ingresos pasivos.
Busca formas de reducir tus gastos. Si quieres ahorrar más o reducir tus deudas, puedes buscar formas de gastar menos, como comparar precios, aprovechar ofertas y descuentos, usar transporte público o bicicleta, consumir menos energía y agua, cocinar en casa, etc. En el sitio web de Cajas de Chile, encontrarás un artículo que te da cinco formas pequeñas de ahorrar.
Evalúa la idoneidad de una compra o un gasto. Puede que los días de ofertas o las liquidaciones por internet sean muy tentadoras. Pregúntate si un gasto extraordinario puede tener cabida en tu presupuesto. Además, resuelve esta duda: ¿es algo esencial para tu vida en ese momento? Este artículo te orientará más sobre las compras necesarias.
Aprovecha los beneficios de las Cajas de Compensación. Las Cajas de Compensación te ofrecen una serie de beneficios que pueden mejorar tu situación financiera, como créditos sociales, subsidios, becas, ahorro previsional, seguros, educación financiera y más. Puedes consultar los beneficios de cada Caja de Compensación en sus respectivos sitios web.
Esperamos que con estos consejos y herramientas puedas optimizar tu planificación presupuestaria del año y lograr mejores metas financieras.
Esperamos que este artículo te haya sido útil y que puedas mejorar tu salud financiera en el 2024.
Tanto las personas que habitan un país, al igual que las empresas, tienen la obligación de pagar impuestospor ley, los cuales pueden tener diferentes características, siendo algunos de estos regresivos.
El dinero recaudado a través de estos, de acuerdo con lo indicado por Tesorería General de la República, tiene como objetivo financiar parte de los gastos del país.
¿Qué son los impuestos regresivos?
Los impuestos regresivos son aquellos que, a cuanto mayor sea la ganancia o la renta, menor porcentaje se deberá pagar sobre el total de la base imponible, de acuerdo con lo indicado por el Servicio de Impuestos Internos (SII).
Un ejemplo de estos es el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el cual afecta de mayor manera, según la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, a los deciles de menores ingresos, debido a que es una misma cifra para todos, en vez de ser proporcional al dinero de cada persona.
Por el lado contrario, está el impuesto progresivo, el cual, conforme a lo descrito por el SII, aumenta la cantidad que se debe pagar a medida que sube la base imponible.
Clasificación de los impuestos en Chile
Los impuestos en Chile están clasificados en los siguientes tres grupos, según el SII:
Impuestos indirectos
Este impuesto es aquel que se aplica por el uso de la riqueza sobre las personas, por lo que es indirecto. De esta manera, entre estos, se pueden encontrar los siguientes:
Impuesto a las Ventas y Servicios (IVA).
Impuesto a los Productos Suntuarios.
Impuesto a las Bebidas Alcohólicas, Analcohólicas y Productos Similares.
Impuesto a los Tabacos.
Impuesto a los Combustibles.
Impuesto a los Actos Jurídicos (de timbres y estampillas).
Impuesto al Comercio Exterior.
Impuestos directos
Estos impuestos son aplicados directamente al titular de la renta o riquezas que los paga. En este grupo, se encuentran los siguientes:
Impuesto a la Renta de Primera Categoría.
Impuesto Único de Segunda Categoría.
Impuesto Global Complementario.
Impuesto Adicional.
Otros impuestos
Además de los impuestos indirectos o directos, existen otros que no clasifican en estas categorías desde el punto de vista de gasto e ingreso, siendo estos los siguientes:
Impuesto Territorial.
Impuestos a las Herencias, Asignaciones y Donaciones.
Losimpuestos son pagos obligatorios que deben realizar las personas o empresas en base a lo que indique la ley, estos tienen diversas características, ya que algunos son progresivos.
El pago de este dinero tiene como objetivo, de acuerdo a lo indicado por Tesorería General de la República, financiar parte de los gastos del país.
¿Qué son los impuestos progresivos?
Los impuestos progresivos son aquellos que, de acuerdo con el Servicio de Impuestos Internos (SII), aumentan la cantidad que se debe pagar a medida que suba la base imponible.
De esta manera, entre más dinero se obtenga, el individuo tendrá que abonar más. Conforme a lo descrito por TaxDown, el objetivo de este sistema es redistribuir la riqueza de manera proporcional.
Lo anterior debido a que las rentas más bajas deberán pagar menos porcentaje, por lo que a menor capacidad económica, el impuesto es más bajo.
¿Qué impuestos son progresivos en Chile?
En Chile los principales impuestos progresivos que se deben pagar son los siguientes, según el SII:
Impuesto Único de Segunda Categoría
Este impuesto se aplica a las rentas del trabajo dependiente, como los sueldos y pensiones, así como también rentas accesorias o complementarias.
La entidad indica que este es un tributo progresivo, el cual será determinado a través de “una escala de tasas, empezando por un primer tramo exento hasta un último tramo con una tasa marginal de 40%. Su cálculo se realiza sobre el salario y/o remuneraciones del trabajo, deduciendo previamente los pagos por concepto de seguridad social y de salud”.
Impuesto Global Complementario
Este es un impuesto anual progresivo destinado a las personas domiciliadas o residentes en Chile por el total de las rentas imponibles de Primera o Segunda Categoría.
De acuerdo con lo declarado por el SII, los individuos que “reciben retiros de utilidades o dividendos de empresas, junto con dichas rentas, deben incluir en la base imponible de este tributo una cantidad equivalente al Impuesto de Primera Categoría que afectó a esas rentas”.
Lo anterior debido a que, sobre esa base, se deberá aplicar la escala de tasas del Impuesto Global Complementario y, por ende, determinar cuál es el monto que se debe pagar.
Impuestos a las herencias, asignaciones y donaciones
Este impuesto progresivo se aplica sobre el “valor neto de las transmisiones de la propiedad a causa de la muerte de una persona” o de las donaciones hechas durante la vida del donante.
De esta manera, el monto a pagar dependerá de la cantidad involucrada, el propósito de la transferencia o transmisión y el grado de parentesco con el beneficiario.
El comercio justo tiene como objetivo que se pueda aplicar una diferente y nueva alternativa al sistema actual, en donde se beneficie a los menos favorecidos por las cadenas de suministros globales, como los artesanos, agricultores y pescadores, entre otros.
La investigación además indica que las metas principales del comercio justo son las siguientes:
Garantizar a los artesanos, pequeños productores y pescadores artesanales, un acceso que sea lo más directo posible al mercado en condiciones justas y equitativas.
Garantizar a los trabajadores condiciones de trabajo dignas, promoviendo su empoderamiento y asociatividad.
Promover un consumo responsable, no solo a nivel ambiental o para la salud individual, sino que también económico y social con el fin de reducir las desigualdades y así buscar un mayor equilibrio en las cadenas de valor globales.
En conclusión, este modelo comercial no solo se enfoca en los seres humanos, sino que también en la naturaleza, la sostenibilidad social y económica, en vez de solo prestar atención a los resultados financieros.
De esta manera, una de las formas en las que los consumidores pueden ayudar en este sistema es pagando el valor correspondiente por un producto, un monto en el que se consideran múltiples factores incluyendo la equidad entre mujeres y hombres.
En el estudio Comercio justo en Chile y sus relaciones con Europa. A través de las voces de sus protagonistas se indica que, durante la transacción, surge una especie de contrato social, en el que los productores deben utilizar los recursos recibidos a través de un pago justo para mejorar así sus condiciones sociales, económicas y ambientales.
Estos son los principios del comercio justo:
Oportunidades para productores desfavorecidos
Transparecnai y responsabilidad
Prácticas comerciales justas
Pago justo
No al trabajo infantil y no al trabajo forzoso
No a la discriminación. Igualdad de género, libertad de asociación
En Chile, todas las personas que trabajan de manera formal deben realizar una cotización obligatoria del 10%, proceso que se debe realizar mediante una administradora de fondos de pensiones (AFP), conforme con lo indicado por la Subsecretaría de Previsión Social.
De esta manera, los trabajadores tendrán que llevar a cabo depósitos periódicos a sus cuentas personales para que así puedan acumular recursos cuando se jubilen.
¿Qué son los fondos de pensiones?
Los fondos de pensiones están conformados por el dinero que las personas depositan en sus cuentas de capitalización individual para la pensión de vejez.
Además, la entidad indica que “el valor de cada uno de los Fondos de Pensiones se expresará en cuotas”, las cuales serán de igual monto, características e inembargables.
Según la Superintendencia de Pensiones, las AFP tienen que invertir los recursos que reciben para así obtener retornos, lo que aumentará los ahorros que las personas van acumulando para su pensión.
¿Las comisiones son diferentes según el tipo de fondo?
Si bien, existen diferentes tipos de fondos, las AFP deben cobrar lo mismo a cada uno de sus afiliados, ya que la comisión que se cobra por administrar los recursos es un porcentaje del ingreso imponible de los individuos, por lo que no dependerá del dinero acumulado en su cuenta obligatoria, conforme a lo indicado por la Superintendencia de Pensiones.
No obstante, la entidad señala que, en el caso de las cuentas de cotizaciones voluntarias, depósitos convenidos, ahorro previsional voluntario y ahorro voluntario, la comisión variará del saldo acumulado.
¿Cuáles son los tipos de fondos de pensiones?
Los diferentes tipos de fondos de pensiones se diferencian, según la Superintendencia de Pensiones, “por la proporción de sus recursos invertidos en títulos financieros de renta variable, los cuales se caracterizan por tener un mayor riesgo y una mayor rentabilidad esperada”.
El cambio climático ha causado que las empresas y las personas deban cambiar su forma de producir y consumir para que disminuir el impacto ambiental. Entre las diferentes medidas que existen para lograr este objetivo, están las finanzas sostenibles.
Con este tipo de decisión económica, se busca que las corporaciones creen proyectos a largo plazo e inviertan en medidas para que los recursos que no son renovables del planeta perduren en el tiempo.
¿Qué son las finanzas sostenibles?
Las finanzas sostenibles son aquellas que toman en consideración no solo lo económico, sino que también lo ambiental, lo social y la gobernanza (también conocido como ESG, por sus siglas en inglés).
De esta manera, al tomar decisiones con respecto al dinero, de acuerdo con la Comisión Europea, se realizarán inversiones a largo plazo en proyectos que no dañen al medio ambiente y sus recursos.
La entidad indica que, entre las consideraciones ambientales, estaría la adaptación al cambio climático, la preservación de la biodiversidad, la economía circular y la prevención de la contaminación, entre otros aspectos.
Por el lado social, las finanzas sostenibles se referirán a la “desigualdad, inclusión, relaciones laborales, inversión en las personas y sus habilidades y comunidades, así como cuestiones de derechos humanos”.
Finalmente, en el aspecto de la gobernanza, la Comisión Europea señala que se hace alusión a las instituciones tanto públicas como privadas y a sus estructuras de gestión, ya que son estas entidades las que tomarán las decisiones finales.
En conclusión, las finanzas sostenibles tienen como objetivo apoyar el crecimiento económico y, al mismo tiempo, reducir los efectos negativos en el medio ambiente.
¿Cómo aplicarlas?
El proceso para aplicar las finanzas sostenibles en una empresa consta de las siguientes tres etapas, de acuerdo con la consultoría española Anquor Corporate Finance:
Evaluación
En esta primera etapa, la empresa debe evaluar su exposición a los riesgos y oportunidades en cuanto a lo ambiental, social y gobernanza. Se debe detallar las operaciones y prácticas que se realizarían con respecto a la sostenibilidad y el impacto que estas podrían causar en el negocio.
Implementación
Tras la evaluación, se podrá pasar a la segunda etapa, que es la implementación, en donde se integran los criterios ambientales, sociales y de gobernanza en las decisiones de inversión y financiación de la empresa.
La consultora española indica que el negocio deberá establecer objetivos y metas claras de sostenibilidad, en donde también se debe involucrar a los empleados.
Medición
En esta tercera y última etapa, se deberán medir los resultados de este proceso, en donde se evaluará el impacto que tuvo las prácticas sostenibles en la empresa.
Todas las personas, una vez que comienzan a trabajar de manera formal, deben realizar una cotización obligatoria del 10%, de acuerdo con lo indicado por la Subsecretaría de Previsión Social.
De esta manera, los empleados efectuarán depósitos periódicos, los cuales tendrán como destino sus cuentas personales con el fin de acumular más recursos para cuando jubilen.
No obstante, para realizar este proceso, las personas deben ingresar al sistema de capitalización individual en una administradora de fondos de pensiones, más conocidas como AFP.
¿Cómo funciona?
La cotización previsional obligatoria se paga directamente a las AFP o “en los bancos, instituciones financieras o cajas de compensación con las cuales las AFP tienen convenio de servicios de recaudación”, conforme a lo señalado por la Superintendencia de Pensiones.
En el caso de los trabajadores a honorarios, el Servicio de Impuestos Internos es el encargado de calcular las cotizaciones de la persona para, posteriormente, informar la totalidad de los montos a la Tesorería General de la República (TGR).
Luego, con esa información, la TGR procederá a depositar las cotizaciones en las respectivas instituciones previsionales del empleado.
Finalmente, el proceso de pago se realizará con las retenciones de impuestos de cada trabajador a boleta de honorarios.
En el caso de las personas que trabajan de manera dependiente, según la Superintendencia de Pensiones, las cotizaciones previsionales deben pagarse por parte de su empleador dentro de los 10 primeros días del mes siguiente del que se recibió el sueldo.
No obstante, se indica que el proceso se puede prorrogar hasta el primer día hábil siguiente si es que dicho plazo expirase durante un día sábado, domingo o festivo.
A pesar de lo anterior, si el empleador realiza la declaración y pago de cotizaciones a través de un medio electrónico, el plazo se extiende hasta el día 13 de cada mes, sin importar si es un día festivo o fin de semana.
Por otro lado, los trabajadores independientes podrán pagar sus cotizaciones previsionales hasta el último día del mes siguiente en el que percibió la renta imponible.
¿Cómo se realiza el pago?
El pago se realiza a través de las Planillas de Pago de Cotizaciones Previsionales disponibles en las agencias de las AFP, en donde se identifica a los trabajadores, su remuneración imponible, la fecha correspondiente y el monto cotizado, según la Superintendencia de Pensiones.
Sin embargo, esta no es la única opción, ya que la entidad indica que también se puede pagar por Internet, a través de la página Previred, utilizando las modalidades “full electrónico o pago mixto”.
Los impuestos verdes fueron aprobados en Chile en septiembre del 2014, aunque su implementación se realizó en el 2017, de acuerdo con lo indicado por el Ministerio del Medio Ambiente.
De esta manera, el artículo 8° de la Ley 20.780 estableció que se introducían los siguientes impuestos anuales a beneficio fiscal:
Impuesto a las emisiones al de CO2 de fuentes estacionarias con calderas y turbinas.
Impuesto a los contaminantes locales sobre fuentes estacionarias con calderas y turbinas (MP, SO2 y NOx).
Impuesto a la venta de vehículos nuevos, aunque el monto de este es fijado por el Servicios de Impuestos Internos en base a sus niveles de rendimiento urbano, emisión de óxido de nitrógeno y el precio del automóvil.
¿Qué son los impuestos verdes?
Los impuestos verdes, que también pueden ser conocidos como ambientales, tienen como objetivo enfrentar los efectos que provoca la contaminación.
De esta manera, según la Comisión Europea, se tiene como finalidad fomentar un cambio hacia energías más limpias, una industria más sostenible y hábitos más ecológicos, al fijar un precio obligatorio debido a los costos sociales.
Además, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico expresa que los impuestos relacionados con el medio ambiente se utilizan cada vez más con el objetivo de incentivar la innovación e inversión en materias tecnológicas para que la huella de carbono se reduzca.
¿Cómo se puede ahorrar dinero y ayudar al medio ambiente?
Debido a que los impuestos verdes requieren que las empresas y personas paguen de forma obligatoria, una forma de ahorrar dinero es, simplemente, evitando cumplir con los requisitos para hacerlo.
Por ende, para esto, los individuos pueden optar por otros tipos vehículos, mientras que las compañías podrán reducir su carga tributaria, según la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, al mejorar sus procesos, realizar cambios de combustibles o innovando tecnológicamente.
Es así como, de acuerdo con la entidad y como fue mencionado anteriormente, se espera promover la eficiencia energética y el uso de fuentes de energía alternativa con el fin de generar un cambio de conductas tanto de las empresas como las personas.
De esta manera, se puede colaborar con la reducción de la contaminación tanto a nivel local como global, contribuyendo así a una mejor calidad ambiental.
Si bien, en un principio quizás se tenga que gastar más dinero para poder aplicar medidas que reduzcan los efectos negativos en el medio ambiente, una vez realizados los cambios, no se deberá pagar impuestos verdes, por lo que ahorrará a largo plazo.