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Un 92% de los chilenos reconoce desechar comida, acto que suele ser realizado en promedio dos veces por semana, de acuerdo con un estudio realizado por Maggi e Ipsos.
Entre los alimentos más desperdiciados, según la misma investigación, está la comida preparada que no se consumió completamente (37%), seguido de frutas y verduras no cocinadas (30%) y el pan (15%).
Además de desechar productos, las personas pierden dinero, ya que están gastando en comestibles que no terminan siendo consumidos, por lo que, para poder ahorrar, se debe reducir el hábito de botar.
¿Cómo reducir el desperdicio de alimentos?
Al reducir el desperdicio de alimentos, las personas podrán ahorrar más dinero, por lo que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura recomienda seguir los siguientes consejos para no desechar comida:
- Tener una dieta más saludable y sostenible: Pueden ser recetas rápidas que se compartan con amigos o familiares.
- Comprar solo lo que se necesita: Se debe planificar las comidas que se realizarán y hacer una lista con los productos que se utilizarán, así se evitará comprar alimentos de más, por lo que se ahorrará dinero.
- No botar las frutas y verduras feas: No se les debe juzgar por su apariencia, ya que estas pueden ser utilizadas de igual manera para un jugo, batido o postre.
- Distribuir bien el almacenamiento: Los alimentos más viejos deben ir al frente para así no olvidarse de ellos y utilizarlos.
- Comprender el etiquetado de los alimentos: La fecha de caducidad indica cuando ya no es seguro comer un producto.
- Empezar de a poco: Se puede comenzar compartiendo platos grandes en restaurantes y comiendo porciones más pequeñas en casa.
- Guardar las sobras: Si no se come todo lo que se preparó, esto se puede congelar para después o para utilizarlo en alguna otra preparación.
- Aprovechar los desperdicios de comida: En vez de tirarlos a la basura, estos se pueden convertir en abono para las plantas.
- Respetar la comida: Al conocer el proceso que implica su elaboración, se evitará desperdiciar los alimentos.
- Comprar a productores locales: Esto con el fin de reducir la contaminación.
- Consumir pescados que sean abundantes: Así se puede evitar que haya más especies sobreexplotadas.
- Donar alimentos que no se consumirán: Al optar por esta opción, no solo se realizará una buena acción, sino que también se evitará, posteriormente, botar un alimento que estaba en buen estado.
